electrolizadores PEM

Transformando procesos industriales con hidrógeno verde

Reemplazar el hidrógeno y los combustibles derivados de fósiles por hidrógeno verde para avanzar en el camino de las industrias hacia la descarbonización.

El desafío: descarbonizar las industrias pesadas

Industrias como el acero, el cemento, los productos químicos y el vidrio se encuentran entre las que más contribuyen a las emisiones globales de CO₂. Estos sectores dependen de procesos de alta temperatura y materias primas fósiles, lo que dificulta su electrificación y descarbonización. Los clientes necesitan alternativas limpias y escalables que se integren con la infraestructura existente.

 

View of an oil refinery and dusk

 

Nuestra solución: producir hidrógeno verde mediante electrólisis PEM

Los sistemas de electrolizadores PEM producen hidrógeno verde a partir de fuentes de energía renovables, lo que ofrece un sustituto inmediato del hidrógeno gris y los combustibles fósiles. El hidrógeno verde genera cero emisiones y puede utilizarse en procesos de combustión, síntesis química y reducción en una amplia gama de aplicaciones industriales.

Ventajas clave:

  • Permite la sustitución directa del hidrógeno de origen fósil.
  • Admite operaciones de alta temperatura y alta pureza.
  • Modular y escalable para implementación piloto a gran escala

¿Por qué hidrógeno verde en sectores difíciles de reducir?

El hidrógeno verde ofrece a los clientes industriales una vía práctica para una descarbonización profunda. Producido mediante electrólisis PEM, proporciona la intensidad energética, la pureza y la flexibilidad necesarias para sustituir los insumos fósiles sin comprometer el rendimiento ni la productividad.

Reemplazo directo

El hidrógeno verde se integra con los procesos industriales existentes

Alta pureza

La electrólisis del agua in situ proporciona hidrógeno ultrapuro para aplicaciones exigentes

Global

Las soluciones van desde proyectos piloto hasta instalaciones integradas a gran escala.

Independencia energética

Reduce la dependencia de las cadenas de suministro de combustibles fósiles con la producción de hidrógeno in situ

Reducción de carbono

Permite una reducción significativa del carbono en aplicaciones industriales difíciles de reducir

Tractor rojo en un campo verde

11 industrias que se benefician del hidrógeno más limpio

El hidrógeno verde es un factor clave para la descarbonización de sectores industriales difíciles de reducir. Su versatilidad le permite adaptarse a una amplia gama de aplicaciones. Y si bien el tamaño de los proyectos varía según la demanda de hidrógeno, cada uno tiene un impacto positivo en la sostenibilidad.

¿Cómo funciona? Impacto
refinerías Las refinerías utilizan hidrógeno en procesos como el hidrotratamiento y el hidrocraqueo para eliminar el azufre y otras impurezas del petróleo crudo, produciendo combustibles más limpios como el diésel y la gasolina. Actualmente, la mayor parte del hidrógeno se produce mediante el reformado de metano con vapor, un proceso con un alto contenido de carbono. Reemplazar el hidrógeno convencional con hidrógeno verde reduce significativamente la huella de carbono de las operaciones de refinación, especialmente en el hidrotratamiento, lo que apoya una producción de combustible más limpia.
Fertilizantes La industria de fertilizantes utiliza el proceso Haber-Bosch para producir amoníaco mediante la combinación de hidrógeno y nitrógeno a alta temperatura y presión. Este proceso consume entre el 3 % y el 5 % del gas natural mundial y el 2 % del consumo final de energía. El hidrógeno verde permite la producción de amoníaco sin emisiones de carbono, lo que reduce la dependencia de los combustibles fósiles y apoya la agricultura sostenible y la seguridad alimentaria.
Productos químicos El hidrógeno es un reactivo clave y un componente básico en la industria química, que se utiliza para producir amoníaco, metanol, polímeros, plásticos y para procesos de purificación. La transición al hidrógeno verde descarboniza una amplia gama de productos químicos, reduce las emisiones de gases de efecto invernadero y disminuye la vulnerabilidad a la volatilidad de los precios de los combustibles fósiles y a las interrupciones de la cadena de suministro.
Acero La fabricación tradicional de acero utiliza carbón en altos hornos, lo que emite aproximadamente 2 toneladas de CO₂ por tonelada de acero. La industria está cambiando a la reducción directa de hierro (DRI), donde el hidrógeno reemplaza al carbón como agente reductor. La fabricación de acero a base de hidrógeno verde emite únicamente vapor de agua, lo que ofrece emisiones casi nulas y el potencial de revolucionar una de las industrias con mayor intensidad de carbono a nivel mundial.
Aluminio La producción de aluminio implica refinar la bauxita para obtener alúmina y fundirla para obtener aluminio, procesos que requieren altas temperaturas. El hidrógeno se utiliza en procesos de recocido, calcinación y tratamiento térmico, incluyendo el reciclaje. El hidrógeno verde apoya la producción y el reciclaje de aluminio con bajas emisiones de carbono, contribuyendo a una economía circular y reduciendo las emisiones de los procesos de alta temperatura.
Electrónicos La fabricación de semiconductores requiere entornos ultralimpios e hidrógeno de alta pureza como gas portador para la deposición, el grabado y la estabilización de películas delgadas. La electrólisis en el sitio proporciona un suministro continuo de hidrógeno verde de grado electrónico, lo que garantiza la calidad del producto y la integridad del proceso al tiempo que elimina las emisiones.
Cemento La producción de cemento implica el uso de hornos a temperaturas extremas utilizando carbón y coque de petróleo. Además, la calcinación de piedra caliza contribuye al 60 % de las emisiones de CO₂ del sector. El hidrógeno verde puede sustituir a los combustibles fósiles en los hornos y combinarse con el CO₂ capturado para producir e-combustibles, lo que permite una economía circular del carbono y reduce las emisiones en uno de los sectores más contaminantes.
Cerámica La cerámica se cuece en hornos a temperaturas superiores a 1,000 °C para producir materiales de construcción, sanitarios y cerámica técnica. Estos hornos suelen funcionar con gas natural. El cambio a la combustión de hidrógeno verde reduce las emisiones de carbono, lo que favorece una fabricación más limpia de productos cerámicos.
Aceites + grasas La hidrogenación modifica la estructura química de los aceites y grasas para su uso en alimentos, cosméticos y biocombustibles, como por ejemplo el endurecimiento de aceites para la margarina. El hidrógeno verde permite procesos de hidrogenación sostenibles en toda la cadena de valor de aceites y grasas, reduciendo el impacto ambiental en la producción de alimentos y cosméticos.
Hidrógeno líquido El hidrógeno se licúa enfriándolo a -253 °C, lo que lo hace denso para un transporte y almacenamiento eficientes. Se utiliza en vehículos propulsados ​​por hidrógeno y sistemas de propulsión aeroespacial. Cuando se produce a partir de fuentes renovables, el hidrógeno líquido respalda las cadenas de suministro de combustible con cero emisiones para el transporte y la exploración espacial, lo que permite obtener energía limpia a gran escala.
Distribución de remolques de tubo El hidrógeno se distribuye a usuarios industriales mediante tuberías, remolques tubulares o cilindros de alta presión. La electrólisis in situ, combinada con estaciones de servicio estratégicamente ubicadas, crea centros de producción localizados. Alimentado por energía solar o eólica, este modelo reduce los costos de transporte y los tiempos de entrega al tiempo que establece redes de suministro de cero emisiones para clientes industriales dispersos.
¿Cómo funciona?
refinerías
Las refinerías utilizan hidrógeno en procesos como el hidrotratamiento y el hidrocraqueo para eliminar el azufre y otras impurezas del petróleo crudo, produciendo combustibles más limpios como el diésel y la gasolina. Actualmente, la mayor parte del hidrógeno se produce mediante el reformado de metano con vapor, un proceso con un alto contenido de carbono.
Fertilizantes
La industria de fertilizantes utiliza el proceso Haber-Bosch para producir amoníaco mediante la combinación de hidrógeno y nitrógeno a alta temperatura y presión. Este proceso consume entre el 3 % y el 5 % del gas natural mundial y el 2 % del consumo final de energía.
Productos químicos
El hidrógeno es un reactivo clave y un componente básico en la industria química, que se utiliza para producir amoníaco, metanol, polímeros, plásticos y para procesos de purificación.
Acero
La fabricación tradicional de acero utiliza carbón en altos hornos, lo que emite aproximadamente 2 toneladas de CO₂ por tonelada de acero. La industria está cambiando a la reducción directa de hierro (DRI), donde el hidrógeno reemplaza al carbón como agente reductor.
Aluminio
La producción de aluminio implica refinar la bauxita para obtener alúmina y fundirla para obtener aluminio, procesos que requieren altas temperaturas. El hidrógeno se utiliza en procesos de recocido, calcinación y tratamiento térmico, incluyendo el reciclaje.
Electrónicos
La fabricación de semiconductores requiere entornos ultralimpios e hidrógeno de alta pureza como gas portador para la deposición, el grabado y la estabilización de películas delgadas.
Cemento
La producción de cemento implica el uso de hornos a temperaturas extremas utilizando carbón y coque de petróleo. Además, la calcinación de piedra caliza contribuye al 60 % de las emisiones de CO₂ del sector.
Cerámica
La cerámica se cuece en hornos a temperaturas superiores a 1,000 °C para producir materiales de construcción, sanitarios y cerámica técnica. Estos hornos suelen funcionar con gas natural.
Aceites + grasas
La hidrogenación modifica la estructura química de los aceites y grasas para su uso en alimentos, cosméticos y biocombustibles, como por ejemplo el endurecimiento de aceites para la margarina.
Hidrógeno líquido
El hidrógeno se licúa enfriándolo a -253 °C, lo que lo hace denso para un transporte y almacenamiento eficientes. Se utiliza en vehículos propulsados ​​por hidrógeno y sistemas de propulsión aeroespacial.
Distribución de remolques de tubo
El hidrógeno se distribuye a usuarios industriales mediante tuberías, remolques tubulares o cilindros de alta presión. La electrólisis in situ, combinada con estaciones de servicio estratégicamente ubicadas, crea centros de producción localizados.
Impacto
refinerías
Reemplazar el hidrógeno convencional con hidrógeno verde reduce significativamente la huella de carbono de las operaciones de refinación, especialmente en el hidrotratamiento, lo que apoya una producción de combustible más limpia.
Fertilizantes
El hidrógeno verde permite la producción de amoníaco sin emisiones de carbono, lo que reduce la dependencia de los combustibles fósiles y apoya la agricultura sostenible y la seguridad alimentaria.
Productos químicos
La transición al hidrógeno verde descarboniza una amplia gama de productos químicos, reduce las emisiones de gases de efecto invernadero y disminuye la vulnerabilidad a la volatilidad de los precios de los combustibles fósiles y a las interrupciones de la cadena de suministro.
Acero
La fabricación de acero a base de hidrógeno verde emite únicamente vapor de agua, lo que ofrece emisiones casi nulas y el potencial de revolucionar una de las industrias con mayor intensidad de carbono a nivel mundial.
Aluminio
El hidrógeno verde apoya la producción y el reciclaje de aluminio con bajas emisiones de carbono, contribuyendo a una economía circular y reduciendo las emisiones de los procesos de alta temperatura.
Electrónicos
La electrólisis en el sitio proporciona un suministro continuo de hidrógeno verde de grado electrónico, lo que garantiza la calidad del producto y la integridad del proceso al tiempo que elimina las emisiones.
Cemento
El hidrógeno verde puede sustituir a los combustibles fósiles en los hornos y combinarse con el CO₂ capturado para producir e-combustibles, lo que permite una economía circular del carbono y reduce las emisiones en uno de los sectores más contaminantes.
Cerámica
El cambio a la combustión de hidrógeno verde reduce las emisiones de carbono, lo que favorece una fabricación más limpia de productos cerámicos.
Aceites + grasas
El hidrógeno verde permite procesos de hidrogenación sostenibles en toda la cadena de valor de aceites y grasas, reduciendo el impacto ambiental en la producción de alimentos y cosméticos.
Hidrógeno líquido
Cuando se produce a partir de fuentes renovables, el hidrógeno líquido respalda las cadenas de suministro de combustible con cero emisiones para el transporte y la exploración espacial, lo que permite obtener energía limpia a gran escala.
Distribución de remolques de tubo
Alimentado por energía solar o eólica, este modelo reduce los costos de transporte y los tiempos de entrega al tiempo que establece redes de suministro de cero emisiones para clientes industriales dispersos.